Diderot consideraba que el arte debía educara los
ciudadanos. En este sentido, el arte debe representar aquellas acciones y
escenas que muevan a la virtud, al heroísmo, a despertar la moral cívica que
debe representar a la nueva sociedad en contraste con la decadencia moral y el
hedonismo del arte rococó.Bajo influencia platónica se identifican belleza,
bondad y virtud.
La Antigüedad grecorromana se constituye en ejemplo
de virtudes cívicas. Las tragedias griegas y la austeridad de la Roma
republicana se convierten en una fuente de inspiración para pintores neoclásicos. Su paradigma es Jaques
Louis David (1748-1825).
Formalmente, la pintura neoclásica da prioridad a la
línea, de contorno nítido, que ofrece claridad intelectual al tema representado.
El color está al servicio de la línea y se prefieren los tonos fríos.
Anton Rafael Mengs publicó un libro donde expresa
ideas esenciales de la belleza en pintura y como el arte debe superar a la
naturaleza y perfeccionarla.
David está influido por Rafael, Correggio y
Caravaggio.
El Juramento
de los Horacios, de 1784, se
considera la primera obra plenamente neoclásica. Es una obra aclamada por su
intencionalidad política. Los hermanos Horacios se juramentan para luchar con
los Curiacios, y son ejemplo de virtud cívica y de sacrificio: luchan por
defender la libertad y la virtud. Contrastan con sus mujeres que parecen
encarnar la moral aristocrática, preocupadas solo por la familia en lugar de
por defender los valores cívicos. La composición rectangular recuerda a un
escenario teatral , las líneas y contornos definen los volúmenes . La luz, fría
y oblicua, recuerda a Caravaggio.
Austeridad y virtud van unidas.
El juramento de los Horacios |
La fama de David se extendió rápidamente hasta
convertirse en el pintor de la Revolución Francesa y en el favorito de
Napoleón.
La intención didáctica de sus obras queda patente La muerte de Sócrates (1787) y Los líctores llevando a Bruto el cuerpo de
sus hijos (1789) donde se ensalzan valores como el sacrificio, el
estoicismo, la defensa de la verdad y del deber.
Los líctores llevando a Bruto el cuerpo de sus hijos |
La muerte de Sócrates |
A partir de 1790 David se convierte en propagandista
de la Revolución. En 1792 fue elegido miembro de la Convención.
Una de sus obras cumbres es La muerte de Marat (1793). David prescinde de representar el hecho
dramático del asesinato de este revolucionario y nos expone el hecho concluida
la acción. Marat, el héroe revolucionario, virtuoso, austero y bondadoso, yace
inerme víctima de una traición. Un fondo neutro , Marat en la humilde bañera
que utilizaba para aliviar los dolores de su enfermedad y simboliza la virtud
que antepone el deber al sufrimiento, una tabla por mesa que simboliza la
honradez del político que vive en la pobreza. Aquí Marat acaba de firmar un
cheque a una mujer pobre con hijos. En el suelo, el arma del asesino contrasta
cruelmente con el arma de Marat, la pluma. La grandeza de esta obra reside en
su economía de medios y en su sencillez. Las luces y la postura de Marat nos
recuerdan inevitablemente al Entierro de Cristo de Caravaggio.
El vacío, esa extremada austeridad es la expresión
del paso del ser a la nada.
En su obra El Rapto
de las Sabinas (1799) recoge el momento en que las mujeres detienen la
batalla. Es un cuadro muy teatral e idealizado pero simboliza la idea de
reconciliación de los franceses.
En Napoleón
cruzando los Alpes (1801) representa a un Bonaparte claramente idealizado,
con el viento agitando por igual a caballo y jinete, adelantando el
romanticismo. Compara a Napoleón con Aníbal.
Coronación de Napoleón |
Napoleón cruzando los Alpes |
En La
Coronación de Napoleón (1805-1807) nos ofrece lo contario a aquella austeridad
del revolucionario Marat. La pompa de la corte, armiños, brocados, terciopelos
y Bonaparte en un gesto de arrogancia, colocándose la corona que toma de manos
del Papa.
J.A.D.Ingres (1780-1867) fue discípulo de David pero aunque
defiende la tradición clásica, su mirada se vuelve hacia
Rafael y Bronzino. Indiferente a la polémica entre Neoclasicismo y romanticismo
, se salta cada vez con más asiduidad las leyes convencionales. Acérrimo
defensor de la línea, en ocasiones llega deformarla o a introducir errores
perspectivos.
Es el primer artista que pinta la realidad tal y como
él la ve y la siente.
la gran odalisca |
En la Bañista
de Valpinçon (1808) , La gran
odalisca (1814) o El baño turco
(1862) nos ofrece su particular forma de sentir el cuerpo femenino, aunque para
ello tenga que sacrificar proporciones anatómicas, deformar líneas y volúmenes.
Para Ingres importa el conjunto y no cada parte por separado. Su arte no fue
comprendido en su época.
la bañista de Valpinçon |
La odalisca y esclava |
Rafael y Fornarina |
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